Arquitectura al Servicio Público: Trayectoria y Experiencias
Arquitectura al Servicio Público: Trayectoria y Experiencias
Por: Arq. Norma Angélica Miramontes Ayala
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Trabajar en el ámbito de la arquitectura dentro del servicio público es una experiencia profundamente enriquecedora. Tener la oportunidad de escuchar a la gente, establecer un primer contacto directo y aprender de sus experiencias es un privilegio y una responsabilidad que asumo con gran dedicación. Desde que ingresé al servicio público, he estado rodeada de un equipo de trabajo excepcional, lo que me ha permitido reconocer la importancia de escuchar y generar cambios a partir del conocimiento directo de las necesidades de la población.
Uno de los aspectos más gratificantes de mi trayectoria en el servicio público es la capacidad de aplicar mis habilidades como arquitecta para cubrir de manera técnica las necesidades de la comunidad. Esto incluye la emisión de licencias, la planificación urbana y el desarrollo de estrategias de movilidad. Utilizar las herramientas y conocimientos adquiridos en la arquitectura para el beneficio colectivo es una de las mayores satisfacciones profesionales que he experimentado.
Es fundamental entender que el gobierno no puede llevar a cabo esta tarea monumental por sí solo. Existe una relación intrínseca entre el crecimiento ordenado de nuestras ciudades y la colaboración entre el gobierno, la sociedad civil y los profesionales de la arquitectura. Juntos, compartimos la responsabilidad de mejorar la calidad de vida de todos los ciudadanos. Como arquitectos, especialmente en nuestro rol como Directores Responsables de Obra (DRO), tenemos la capacidad de sentar precedentes, asegurar el cumplimiento de normativas y estar en constante búsqueda de propuestas innovadoras.
Trabajar de manera ordenada y en conjunto es esencial para proporcionar bienestar a la población y lograr el objetivo de hacer ciudad. En este sentido, mi experiencia en la dependencia de desarrollo urbano municipal ha sido una fuente constante de satisfacción. He visto cómo nuestros esfuerzos colectivos han resultado en mejoras tangibles para la ciudad de Durango, mi ciudad natal.
Durango es una ciudad con un vasto potencial y diversas necesidades. Nuestro trabajo ha abarcado desde la implementación de estrategias de movilidad hasta la planificación detallada del crecimiento urbano. Hemos emitido licencias y desarrollado proyectos que no solo atienden las necesidades actuales, sino que también anticipan las futuras demandas de la comunidad. Este enfoque proactivo nos ha permitido trabajar arduamente por una ciudad más ordenada y habitable.
Uno de los logros más significativos ha sido la mejora de la infraestructura urbana, que incluye el diseño y la ejecución de proyectos de movilidad que facilitan el desplazamiento de los ciudadanos de manera eficiente y segura. Además, hemos trabajado en la revitalización de espacios públicos, creando áreas verdes y zonas de recreación que mejoran la calidad de vida de los habitantes.
Un aspecto crucial de nuestro trabajo ha sido la colaboración constante con la comunidad. Escuchar sus preocupaciones y sugerencias nos ha permitido desarrollar soluciones que son tanto prácticas como sostenibles. La participación ciudadana ha sido una pieza clave en nuestro proceso, asegurando que nuestras intervenciones arquitectónicas no solo cumplan con los estándares técnicos, sino que también reflejen las aspiraciones y necesidades de los ciudadanos.
La planificación urbana y la emisión de licencias son procesos complejos que requieren una comprensión profunda de la normativa y una visión a largo plazo. Hemos trabajado para simplificar estos procesos, haciendo que sean más accesibles para los ciudadanos y promoviendo un desarrollo urbano ordenado y sostenible. Este enfoque ha permitido que más personas puedan mejorar sus propiedades y contribuir al crecimiento de la ciudad.
La figura del arquitecto en el servicio público es esencial para garantizar que las ciudades crezcan de manera ordenada y sostenible. Nosotros, como profesionales, debemos estar siempre atentos a las oportunidades de innovar y proponer nuevas soluciones. Trabajando de la mano con el gobierno y la sociedad civil, podemos asegurar que nuestras ciudades sean lugares donde todos los ciudadanos puedan disfrutar de una alta calidad de vida.
La arquitectura al servicio público es una labor que trasciende la mera construcción de edificios. Se trata de escuchar, aprender y colaborar con la comunidad para crear espacios que respondan a sus necesidades y mejoren su bienestar. La colaboración entre la sociedad civil, el gobierno y los arquitectos es fundamental para lograr un desarrollo urbano sostenible y equitativo. Sigamos trabajando juntos, innovando y proponiendo soluciones que beneficien a todos.
